6 técnicas de estudio imprescindibles para preparar una oposición

técnicas de estudio

Una recomendación inicial que ofrecemos a nuestros estudiantes es que, en el proceso de preparación de oposiciones, es esencial que se comprendan a sí mismos y se conozcan para determinar cómo maximizar al máximo su capacidad de estudio. No solo la cantidad de horas dedicadas al estudio es crucial, sino también la calidad de las mismas. Por lo tanto, resumiremos las técnicas de estudio más efectivas que se pueden experimentar para encontrar la que mejor se adapte a sus propias características.

Previo a explorar en detalle cada una de estas técnicas de estudio, es importante destacar ciertos principios comunes que aumentan las posibilidades de éxito en una oposición. Un ejemplo es la necesidad de establecer una sólida planificación, en colaboración con un tutor personalizado, que se ajuste al tiempo disponible para dedicar al estudio de la oposición.

Es relevante señalar que esta planificación debe ser realista y definir desde el inicio la cantidad de tiempo que se puede destinar diariamente al estudio de la oposición y cómo estructurarlo de manera adecuada. En este contexto, contar con la experiencia de profesionales expertos en la preparación de oposiciones, como el equipo de docentes de Postal 3, resulta fundamental para recibir una orientación adecuada.

Una vez que se ha establecido una planificación viable y realizable, es el momento de identificar las técnicas de estudio más efectivas que se pueden emplear.

 

Cómo preparar una oposición: 6 técnicas de estudio

A continuación te contamos en qué consisten algunas de las técnicas de estudio más efectivas con nuestros alumnos. No obstante, cada persona es diferente, y es fundamental encontrar la técnica más adecuada a tus capacidades y aptitudes.

 

Técnica del subrayado

La técnica de subrayado es esencial para quienes se preparan para opositar. Contrario a la creencia inicial de muchos opositores, subrayar no es tan simple como parece. ¿Por qué? Porque al principio, tendemos a pensar que todo es crucial, lo que nos lleva a subrayar casi toda la información.

No obstante, la técnica de subrayado tiene un propósito específico: resaltar únicamente las ideas más importantes de cada tema. El subrayado puede servir como el primer paso para crear resúmenes, esquemas o fichas que faciliten la memorización y el estudio.

Además, asignar un color a cada nivel de importancia es muy útil, pero es importante que se mantenga consistente. Por ejemplo, las ideas imprescindibles y de mayor relevancia pueden destacarse en colores llamativos como el rosa o el verde, mientras que lo importante pero no esencial puede subrayarse en amarillo. Esta codificación de colores ayuda a identificar rápidamente las ideas clave al desarrollar un tema o al realizar una prueba.

 

Técnica del esquema

Resumir y esquematizar son dos procesos distintos, y este error es común entre los nuevos opositores. Los profesores de Postal 3 siempre enfatizan la importancia de que los estudiantes comprendan la diferencia entre la técnica de resumir, de la que hablaremos a continuación, y la técnica de esquematizar.

Un esquema es una representación gráfica de conceptos que facilita la creación de asociaciones y la rápida interpretación de la información. Mientras que el resumen se centra en sintetizar conceptos, el esquema prioriza la representación visual. De hecho, resumir es fundamental para crear un esquema efectivo, ya que ayuda a distinguir los conceptos esenciales de los secundarios.

En cuanto a los tipos de esquemas, la variedad es amplia y depende de las representaciones visuales y gráficas que deseemos crear. Los esquemas ramificados o de desarrollo son comunes, pero las posibilidades son numerosas.

En resumen, es crucial que los opositores comprendan la diferencia entre resumir y esquematizar, ya que ambas técnicas desempeñan un papel importante en el proceso de estudio y memorización.

 

Resumen

Para entender cómo aplicar la técnica del resumen, lo primero que hay que hacer es definir el concepto de resumir de manera clara y concisa. Resumir implica condensar la información esencial para facilitar la comprensión y estructuración del contenido aprendido. Un resumen se caracteriza por ser:

  • Breve: Un resumen no debe extenderse innecesariamente; su objetivo es reducir la información inicial. Se recomienda que abarque una tercera, cuarta o quinta parte del texto original, dependiendo de su longitud.
  • Claro: El propósito del resumen es plasmar de manera concisa y nítida los aspectos más importantes de un tema, distinguiendo claramente la introducción, el cuerpo y la conclusión.
  • Inteligible: Resumir no significa reducir al mínimo. Cada elemento en el resumen debe ser comprensible y claro para que sea efectivo.
  • Objetivo: El resumen se centra en capturar la información crucial sin incluir valoraciones personales o juicios.
  • Jerárquico: Para lograr claridad, es esencial organizar el resumen jerárquicamente, destacando las ideas principales y secundarias.

Un buen ejercicio para aprender a resumir es practicar con convocatorias de oposiciones del Boletín Oficial del Estado, ya que estos documentos suelen ser extensos, y la habilidad de extraer la información principal y condensarla en un texto más breve es fundamental.

 

Método Leitner

Esta técnica de estudio se fundamenta en el uso de tarjetas de memoria, también conocidas como «memory cards». Cada tarjeta consta de dos lados: en el frente se encuentra la pregunta y en el reverso, la respuesta correspondiente. El propósito principal de esta técnica es organizar las tarjetas en diferentes categorías en función de si recordamos o no la respuesta.

Para ilustrarlo mejor, si tomas una tarjeta y respondes correctamente durante una semana consecutiva, la avanzarás a la caja número 2. Después de otra semana, repites la misma pregunta. Si logras recordar la respuesta y responder correctamente, la tarjeta avanzará a la caja número 3. Sin embargo, si la respuesta es incorrecta, la tarjeta regresará a la caja número 1, y el proceso comenzará de nuevo.

Este método debe repetirse de manera continua cada semana, luego cada 15 días y, finalmente, cada mes. De esta manera, te ayudará a repasar los conceptos más importantes y evitar que se te olviden en preparación para el examen.

 

Método Pomodoro

La técnica Pomodoro es otra de las más habituales, sobre todo, para los opositores que comienzan, porque ayuda a crear un hábito de estudio. Se basa en fraccionar el tiempo del estudio para gestionarlo de forma más eficiente y productiva. Ya sabes que, no por más horas que estudies, significa que todas sean igual de productivas, y esa es la base del método Pomodoro. Siguiendo este método, el tiempo se estructura así:

  • Estudiamos 25 minutos (período al que denominamos 1 pomodoro)
  • Descansamos 5 minutos
  • Cuando completemos 4 pomodoros, los períodos de descanso incrementarán a 15-30 minutos. 

 

Mapas en blanco

En esta estrategia de estudio, el objetivo es completar una serie de mapas en blanco que están interconectados para verificar tu comprensión de los conceptos e ideas que estás aprendiendo. Además, esta técnica facilita la revisión de las relaciones entre estos conceptos, lo que te ayuda a memorizarlos y a organizar mejor el tema en tu mente. Un ejemplo común de su aplicación es para estudiar el conjunto de pesos y medidas que forma parte del temario de las oposiciones a Correos.

Es importante destacar que la revisión es tan crucial como el proceso de estudio en sí. Para optimizar tu aprendizaje, es recomendable planificar cuándo realizarás estas revisiones. Por ejemplo, debes repasar la información inmediatamente después de haberla estudiado por primera vez, luego nuevamente después de 15-20 minutos. Continúa repasando a intervalos de 6-8 horas y 24 horas.

Es beneficioso repetir este proceso de revisión a los 3 días, 7 días, 14 días y 30 días. Estos intervalos de tiempo aseguran que puedas repasar todos los temas que estás estudiando, evitando olvidar ninguno y fortaleciendo tu retención de conocimientos.

 

Existe una amplia gama de técnicas de estudio disponibles. A lo largo de nuestros más de 50 años de experiencia formando opositores, en Postal 3 hemos aprendido muchas cosas. Somos conscientes de que uno de los desafíos más grandes para los opositores es determinar cuál de estas técnicas se adapta mejor a sus habilidades de estudio.

Por ello, todos nuestros profesores se centran mucho en que los alumnos tengan las herramientas que les permitan decidir cuál de las técnicas de estudio encaja mejor con ellos. La clave es que encuentren aquella que les permita optimizar el tiempo y aumentar la eficiencia y la productividad. 

Es importante destacar que, como mencionamos al principio, el éxito en la preparación de una oposición no se limita únicamente a estudiar mucho, sino a estudiar de manera efectiva y adecuada a las propias aptitudes de cada estudiante.

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